Hoy en clase he recuperado este libro, por casualidad, y no sabéis cuanto me ha gustado el azar.
Estábamos en Asamblea trabajando semejanzas y diferencias entre dos biografías que acababa de leer, la de Myriam y la de Carmela, dos mamás de la clase. Y después de ver que tenían en común: nombre, apellidos, fecha de nacimiento (ellos decían el día de su cumple), el lugar donde nació, cuenta cosas de pequeña, de un poco más grande , etc. Y... Como los veía un poco "paraíllos" porque creía que no me estaban entendiendo, les hice otra pregunta.
-Si yo quiero escribir una biografía, ¿¿qué tendría que poner en ella??
Como no arrancaban, le dije a Lorena que me pasara unos libros de la biblioteca y cogió éste, entre otros.
-Bien, ahora, me gustaría que escucharáis atentamente para saber qué hay aquí dentro de este libro. ¿Será una biografía o no? (les había leído fragmentos de la biografía de Picaso y de Dalí, de libros)
Me puse a leer el cuento todo seguidito, sin enseñarles las imágenes, aunque alguno no se podía resistir a asomarse un poquito. Cuando terminé de leer el cuento. ¡Es precioso!.- les dije, ¿¿qué acabo de leer?? Se abren los ojos, la sonrisa en los labios; ponen cara de incertidumbre, y dicen algunas: una historia, un libro. Y Gabriel con gran entusiasmo dijo: ¡¡UN CUENTO!! Muy bien, Gabri; entonces, si yo quiero hacer mi biografía, ¿tengo que escribir un cuento? pregunté al grupo. Los pocos que contestaron - ¡¡Nooo!!!, dijeron que tenía que escribir cosas mías, de mi vida, "de cuando era chica, y de cuando crecí".
Mañana seguiremos analizando biografías y este cuento maravilloso.
Aprendemos sólo si nos hacen pensar, reflexionar, si nos "rompen esquemas" y buscando soluciones; y si además, pensamos juntas mejor, porque compartimos el conocimiento; y además de crecer cognitivamente, crecemos emocionalmente, por todo lo que ponemos en juego y además, compartiendo libros tan bonitos como éste.
Estábamos en Asamblea trabajando semejanzas y diferencias entre dos biografías que acababa de leer, la de Myriam y la de Carmela, dos mamás de la clase. Y después de ver que tenían en común: nombre, apellidos, fecha de nacimiento (ellos decían el día de su cumple), el lugar donde nació, cuenta cosas de pequeña, de un poco más grande , etc. Y... Como los veía un poco "paraíllos" porque creía que no me estaban entendiendo, les hice otra pregunta.
-Si yo quiero escribir una biografía, ¿¿qué tendría que poner en ella??
Como no arrancaban, le dije a Lorena que me pasara unos libros de la biblioteca y cogió éste, entre otros.
-Bien, ahora, me gustaría que escucharáis atentamente para saber qué hay aquí dentro de este libro. ¿Será una biografía o no? (les había leído fragmentos de la biografía de Picaso y de Dalí, de libros)
Me puse a leer el cuento todo seguidito, sin enseñarles las imágenes, aunque alguno no se podía resistir a asomarse un poquito. Cuando terminé de leer el cuento. ¡Es precioso!.- les dije, ¿¿qué acabo de leer?? Se abren los ojos, la sonrisa en los labios; ponen cara de incertidumbre, y dicen algunas: una historia, un libro. Y Gabriel con gran entusiasmo dijo: ¡¡UN CUENTO!! Muy bien, Gabri; entonces, si yo quiero hacer mi biografía, ¿tengo que escribir un cuento? pregunté al grupo. Los pocos que contestaron - ¡¡Nooo!!!, dijeron que tenía que escribir cosas mías, de mi vida, "de cuando era chica, y de cuando crecí".
Mañana seguiremos analizando biografías y este cuento maravilloso.
Aprendemos sólo si nos hacen pensar, reflexionar, si nos "rompen esquemas" y buscando soluciones; y si además, pensamos juntas mejor, porque compartimos el conocimiento; y además de crecer cognitivamente, crecemos emocionalmente, por todo lo que ponemos en juego y además, compartiendo libros tan bonitos como éste.
En el siguiente enlace hay una presentación con el cuento. Disfruténla.
Este libro está basado en una fábula de la India. Cuenta la historia de siete ratones de colores que encuentran Algo Muy Raro al lado de su laguna. Cada uno de los días de la semana uno de ellos sale a investigar, elaborando diversas hipótesis sobre cada una de las partes que se van encontrando: así cotejarán que lo que se topan es un pilar, una culebra, una lanza, un acantilado, un abanico, una cuerda…, apareciendo lo que cada ratón imagina en su mismo color. El último turno le tocará a Ratón Blanco que, elaborando un exhaustivo análisis, llegará a la conclusión de que se trata de un elefante, conclusión que será apoyada por sus compañeros. El autor de este libro, Ed Young, está considerado uno de los diez mejores ilustradores del mundo. Nos presenta un libro ilustrado en el que lo visual deslumbra, narrando una historia mediante un collage montado sobre fondo negro que sirve de marco a figuras minimalistas, la escritura se muestra en contraste inverso al habitual, letras en blanco sobre fondo negro, donde coinciden la brevedad y precisión del texto con la sobriedad del diseño. La conclusión que obtenemos se plasma en la moraleja ratoneja con la que se cierra la historia: “Si sólo conoces por partes dirás siempre tonterías, si puedes ver el todo hablarás con sabiduría”. El mensaje es claro, tenemos la necesidad de conocer los distintos puntos de vista para no quedarse con una visión parcial de las cosas, la sabiduría está en apreciar el conjunto y no una parte.
Parece un cuento interesante, probaré a contarlo en mi clase.
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